miércoles, 4 de abril de 2018

Pon un selfie en una farola


"Grindr, la ‘app’ de citas gays, comparte datos de VIH de sus usuarios"

Resultado de imagen de gay horde
¡Hordas! ¡Hordas de maricones indignados por la cesión de sus datos en Grindr a otras empresas!

¿Está justificada tanta indignación?

Cuando yo era pequeño mis padres me pedían que yo leyese el manual de uso del VHS. Porque no lo entendían, porque no querían leerlo, o porque no querían entenderlo. Así que luego no podían enojarse cuando el VHS parecía actuar por cuenta propia, ya que ellos ni se habían molestado en abrir la página 2 del manual de instrucciones.

Algo parecido pasa con Grindr y las redes sociales en general; ¿Qué derecho tenemos en quejarnos del uso que hacen de nuestros datos cuando ni siquiera somos capaces de leer las condiciones que nos ponen en el momento que nos damos de alta?

Vamos por partes:

1) LA NOTICIA PROVEE UN BUEN TITULAR, PERO NO ES TODO ASI DE DRAMÁTICO COMO SE PINTA.
Aunque es cierto que Grindr ha compartido datos considerados "sensibles" de sus usuarios, realmente no hay datos personales en Grindr que puedan relacionar a una persona en particular con su estado de VIH o sus preferencias sexuales. Yo soy usuario de Grindr; mi nick es "GayMerde", y mi correo electrónico de registro es "peneadictoXVI@peneadictoXVI.com". Es decir, que ni por una cosa ni por otra Grindr puede averiguar que mi nombre es Federico, que tengo orejas de elfo, que soy calva, o que mi fetiche son los pepitos de crema.
Yo tengo una foto de mi cara pero podría ser la cara del Gran Wyoming, o una foto de un helado, un torso decapitado, o una radiografía del pubis. Ninguna de esas cosas se verifica como "real", y ninguna de ellas puede relacionar la identidad de una persona con el perfil que ha creado. 

 2) GRINDR ADVIERTE QUE TUS DATOS PUEDEN 
(Y SERÁN) CEDIDOS A TERCEROS.
Es tan fácil como acceder a las condiciones contractuales de Grindr y su política de privacidad:
https://www.grindr.com/terms-of-service
https://www.grindr.com/privacy-policy
En el punto 13 viene a decir algo así como que tus datos pueden ser cedidos a terceras compañías y que Grindr ni siquiera se hace responsable del  uso que esas terceras compañías hagan de esa información. ¿Te parece mal? Puede que tengas razón, pero advertido estás desde el mismo momento en que das de alta el perfil. Si no estás de acuerdo, no te haces el perfil. ¡Así de simple!
Para colmo de males, en las condiciones también se establece que la legislación aplicable al tratamiento de tus datos es la de EEUU, que es donde esta la sede de Grindr. Por lo tanto ni siquiera te puedes escudar en la Ley Orgánica de Protección de Datos, ya que es una ley de ámbito Europeo. Así que mariquitas de España, 
¡VUESTROS DATOS ESTÁN EN PODER DE DONALD "RAT-HAIR" TRUMP! 
Bienvenidos a la globalización.


3) LOS DATOS QUE SE DEJAN EN GRINDR SON VOLUNTARIOS.
En su apartado de política de privacidad aparece una frase reveladora, casi como la Piedra Roseta o las tablas del Mar Muerto:


"Do not include information in your profile that you want to keep private" .... a ver si lo puedo traducir... "NO INCLUYAS INFORMACIÓN EN TU PERFIL QUE QUIERAS QUE SEA PRIVADA". ¡Wow! De pronto he sentido como una revelación divina apropiándose de mi espíritu.


En mi perfil de Grindr yo tengo mi estado de VIH. Y sé que es público y que mucha gente puede verlo. Lo hago por razones de normalización y de quitar hierro a ciertos temas, pero lo hago de forma absolutamente voluntaria. Grindr no verifica si la información es veraz (si se pusieran a verificar la información, desaparecerían 98 de cada 100 perfiles), ni tampoco obliga a que ese dato sea completado al hacer el perfil (por eso "Peneadicto XVI" puede tener un perfil en Grindr como tantos otros sacerdotes). A dia de hoy poner información en una APP de contactos o una red social, no es muy diferente a imprimir papelitos con datos personales y pegarlos en las farolas. Seguramente nadie en su sano juicio haría ésto último, en cambio parece muy normal poner toda clase de información sensible públicamente en Internet para luego horrorizarse cuando otros se enteran de esa información. ¿Por qué no empapelar el barrio con retratos de nuestro esfínter hechos en el espejo del baño?

4) ESTAMOS HABLANDO DE EMPRESAS, NO DE LAS CARMELITAS DE LA CARIDAD.
Cuando somos demasiado inocentes, pasamos la linea que nos separa de la estupidez. Facebook, Twitter, Grindr, Tinder, son EMPRESAS. Empresas que nos dan un servicio GRATUITO. ¿De verdad pensáis que se mantienen solas? ¿Que no van a pedir algo a cambio? Habrá que pagar a sus empleados, el mantenimiento de los servidores, la investigación en nuevas tecnologías, etc. Con el dinero que les aportamos está claro que no lo vamos a hacer, porque la inmensa mayoría de los usuarios de redes sociales no pagan un duro por usarlas. ¿Como creéis que se van a financiar? ... ¡Fácil! Venta de listas de datos o publicidad. No hay mas. No es tan difícil de entender. 
¿No os llama la atención cuando en una página web la publicidad que se muestra es, casualmente, relacionada con búsquedas que hemos hecho recientemente en Google? Amigos míos, hay que ser mas astutos, más lógicos, y probablemente mas cínicos: Ninguna empresa hace nada a cambio de nada. ¡Bienvenidos al Neo-Liberalismo!

Con todo esto no pretendo justificar que nuestros datos anden pululando por Internet, pero si llamar la atención de que no nos podemos indignar sobre cosas que deberíamos saber de antemano si somos un poco cuidadosos con lo que hacemos y leemos las condiciones de los sitios en las que nos anotamos.
En resumen:
- Grindr no tiene datos personales.
- Si los tiene, es porque nosotros los hemos cedido voluntariamente. 
- Podemos borrar nuestro perfil o elegir que información queremos que sea pública.
- Siempre tenemos que tener una sana desconfianza sobre cualquier cosa que se nos brinde "gratuitamente" por una empresa.
- Y por último; siempre tenemos que tener una sana desconfianza de los titulares que apelan al sentimentalismo / alarmismo (al final los periódicos y las webs de noticias también son empresas intentando rentabilizar las noticias).

Se puede vivir sin Grindr (aunque quizá se folle menos), y se puede elegir que información compartimos (no es necesario aparecen en bragas en TODAS las fotos de Instagram).
Así que repito; que no cunda el pánico. Que no se trata de la segunda venida del anticristo ni el fin de los tiempos.....

.... es capitalismo salvaje... ¡Nada mas!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

La sifilítica del pueblo

     Las telenovelas nos pueden dar escenas muy bizarras e increíbles, pero a veces en su título podemos encontrar una verdad incontestable....